lunes, 29 de septiembre de 2014

Amsterdam: algo más que canales, bicis y coffee shops

Amsterdam, Paises Bajos, Holanda. Bicis, canales, tulipanes, queso, coffee shops, barrio rojo. Libertad, respeto, tolerancia. Un lugar recomendable, un lugar que hay que visitar, un lugar para volver.




Sin entrar en mayores pretensiones, os propongo una serie de platos, comidas y restaurantes que si o si hay que probar o visitar cuando se visite Amsterdam.

Patatas fritas

Probablemente las mejores patatas fritas de Amsterdam. 




Las venden en una pequeño y antiguo puesto que lleva abierto desde 1887, Vlaams Friteshuis Vleminckx. Las sirven en un cucurucho de papel y se puede incluir una gran variedad de salsas. El cucurucho mediano vale 3,70 euros. Realmente merece la pena acercarse ya que está en Voetboogstraat 31muy próximo a la zona comercial de Kalverstraat. Generalmente hay cola para hacerse con ellas. Hay que probarlas con mayonesa. Recordemos lo que decía los protagonistas de Pulp Fiction en esta escena. 



Arenques

Uno de los tentempiés más tradicionales de Amsterdam son los arenques frescos. A lo largo de la ciudad hay quioscos en los que los venden como si fueran perritos calientes, para comer en la calle. Se trata de arenque crudo, salado, acompañado de cebolla picada y pepinillo. Cuestan unos 2,5 euros. Se llaman ‘haring’ y también pueden ir entre pan ‘broodje’. No deja de ser pescado crudo así que no está hecho para cualquier paladar.




Bitterballen

Si decides sentarte en una de las innumerables terrazas de Amsterdam a disfrutar de una cerveza, probablemente Heineken, harás muy bien. Y si te apetece picar algo para que el liquido elemento pase mejor una muy buena opción, por lo sencillo del nombre y los buenas que están, es pedir ‘bitterballen’. Son unas especie de croquetas redondas acompañadas de mostaza para untar. Las encontrarás en la mayoría de los bares, pubs y cafés.



Helados

Aunque la vida en Amsterdam es ligeramente más cara que aquí, hay algunas cosas en las que nos llevan ventaja, esto es, que son más baratas. Los helados, por ejemplo.



Existen diversos locales que venden helados por poco más de 1,5 euros, pero aquí vamos a destacar los de Banketbakrerij van der Linde, una heladería tradicional abierta desde 1937 situada en Nieuwendijk 183Están exquisitos y el helado pequeño cuesta ¡0,75 céntimos!




Hamburguesas

La cantidad y variedad de restaurantes que hay en Amsterdam es abrumadora, hasta el puno de no saber qué elegir. El pasado colonialista del imperio holandés ha facilitado la presencia de restaurantes indonesios, surinameses, ceilandeses, indios, orientales… Quizá sea por ello que aquí va una recomendación diferente. Se trata de probablemente la mejor hamburguesería de la ciudad.



Un local pequeño que sirve hamburguesas de vacuno, pollo y ternera con salsas de aguacate, por ejemplo. Muy recomendable, aunque quizá demasiado especiadas. 


miércoles, 9 de abril de 2014

Uxarte sagardotegia, en Amorebieta




Jornada de celebración por partida doble que decidimos pasar de sidrería. Entre las muchas opciones que se nos presentaban nos decantamos por la sidrería Uxarte de Amorebieta. ¿Por qué? Pues porque se adecuaba a lo que buscábamos: una sidrería, que estuviera un poco alejada como para tener que desplazarnos pero que se pudiera ir en transporte público, que no fuera excesivamente cara y que tuviera un menú de calidad. Todo eso lo cumple la sidrería Uxarte así allí nos dirigimos.

Reservamos para 10 personas con antelación, por si las moscas, ya que no es un sitio demasiado grande. Se trata de un caserío que se encuentra en la carretera N-634 pasando Amorebieta a la izquierda. Cogimos el bizkaibus 3912 Bilbao-Eibar en Hurtado de Amezaga. Sale cada hora a las y medias. Tarda cerca de una hora hasta la parada en la que nos bajamos, Montorra. De allí hay que retroceder unos 100 metros por la carretera y coger la primera entrada a la derecha. Un cartel señala que la sidrería Uxarte se encuentra a 300 metros.
Nada más llegar sorprenden las espectaculares vistas del Anboto que se pueden disfrutar desde la terraza de la sidrería. Ya en su interior comenzamos a degustar la sidra de las 6 cupelas. Realmente exquisita. Un cuadro en el que había enmarcado un artículo periodístico recordaba que la sidra que elaboran en Uxarte está entre las 12 mejores del mundo.

Tortilla de bacalao.
Caldito de carne.









El menú comienza con un caldito de carne para entonar el cuerpo. Sigue con la tortilla de bacalao, redonda y demasiado cuajada para nuestro gusto y quizá un poco sosa, pero rica. Después tacos de bacalao frito con pimientos verdes. Probablemente lo que más éxito tuvo de toda la comida. Realmente el bacalao estaba exquisito. Hasta hubo quien untó el plató. La verdad el pan invitaba a ello ya que también fue algo reseñable. 

Zancarrón con pimientos rojos.

Junto al bacalao sacaron zancarrón con pimientos rojos. Algo marca de la casa y que no se suele ver en otras sidrerías y que estaba muy rico. El plato fuerte, como siempre, la chuleta. Estaba buena, tierna y jugosa pero quizá un pelín demasiado hecha. Deberían habernos preguntado si la queríamos más o menos hecha. En esta sidrería se puede elegir entre chuleta o pollo de caserío guisado a la sidra. Hubo quien lo pidió y estaba rico, aunque quizá la ración un tanto escasa. 

Pollo de caserío a la sidra.

Chuleta.

De postre, además del tradicional queso con membrillo y nueces, se podía elegir entre arroz con leche, natillas, cuajada, tarta de whisky y contessa.

Todo ello acompañado de sidra en botellas en la mesa y los inevitables recesos en la comida para levantarse a la cupelas a echar unos tragos de sidra. En resumen, una opción muy recomendable para pasar un día en cuadrilla disfrutando de una sidrería sin preocuparse del coche. El café también está incluido en los 25 euros más IVA que cuesta el menú.

Uxarte sagardotegia


lunes, 24 de febrero de 2014

Tarta de tres chocolates, negro, con leche y blanco

Todo no va a ser comer fuera de casa, que la economía está como está. Así que hoy os proponemos una receta para hacer en casa, pero no es una receta cualquiera, si no una con la que tenemos el éxito asegurado. Se trata de una tarta de tres chocolates, un postre fácil de hacer, delicioso y con una apariciencia muy atractiva. En definitiva, que estáis tardando en poneos manos a la obra y dejar a vuestros invitados con la boca abierta.



Ingredientes:
  • 150 gr. de chocolate negro.
  • 150 gr. de chocolate con leche.
  • 150 gr. de chocolate blanco.
  • 100 gr. de azúcar.
  • 600 ml. de nata.
  • 750 ml. de leche.
  • 3 sobres de cuajada.
  • Galletas.
  • Mantequilla.

Modo de preparación:
-En primer lugar trituramos las galletas (medio paquete), preferentemente Digestive, ya que aportan un punto de sal que le da un toque muy sabroso; las juntamos con la mantequilla y un poco de leche hasta conseguir una masa.
-La mezcla resultante la ponemos como base en un molde desmontable y lo metemos al frigorífico.
-Comenzamos con los chocolates. Primero el negro. Ponemos al fuego 200 ml de nata y 250 ml de leche junto con 50 gr de azúcar. Añadimos el chocolate negro troceado y removemos hasta que se derrita. Unimos el sobre de cuajada y removemos durante unos minutos hasta que hierva.
-Vertemos sobre la base de galleta y volvemos a introducir en la nevera.
-Ahora repetimos la misma operación con el chocolate con leche. A la hora de verter la mezcla sobre la tarta lo haremos con mucho cuidado y suavidad.
-La tercera capa es la de chocolate blanco. Ponemos al fuego 200 ml de nata y 250 ml de leche. En este caso no añadimos azúcar. Echamos el chocolate para que se derrita y el sobre de cuajada. Removemos y esperamos a que hierva.
-Vertemos esta última capa sobre la tarta, que previamente habremos rallado con un tenendor.
-Introducimos en la nevera y dejamos durante 24 horas.
-Desmoldar con cuidado y decorar al gusto, con chocolate rallado, frutos rojos, etc.
-A disfrutar.


jueves, 2 de enero de 2014

Taberna Regi, en Urduliz. Sobresaliente



Da gusto acudir a un restaurante del que has oído buenas críticas y salir de allí tremendamente satisfecho; emocionado por la calidad de la comida, agradecido por el trato recibido y encantado por el precio pagado después de haber disfrutado de un menú sobresaliente, siendo el único pero, por poner alguno, que el volumen del hilo musical era excesivo.
Todos estos halagos se los merece el restaurante Regi, situado en Urduliz y que regenta la familia Somarriba, a cuyo clan pertenece Joane, la mejor ciclista vasca de todos los tiempos. El local, denominado Taberna Regi, se encuentra frente al Ayuntamiento de la localidad, en el cruce de las carreteras procedentes de Sopelana y Mungia. Dispone de una pequeña terraza y un comedor no muy grande junto a la barra. A primera vista puede sorprender, ya que la impresión inicial no da señales de lo que nos encontraremos dentro. Pero merece la pena dar el paso.
Aunque cuenta con menú degustación por 50 euros, nos detendremos en el menú Bistrot, que ofrecen por 20 euros (iva incluido). La decoración del local tiene un aire moderno con motivos ciclistas y debido al reducido tamaño del comedor se echa en falta algo más de espacio entre las mesas. Pero vamos a lo que nos interesa. La comida. El menú se compone de unos aperitivos, un plato principal, un segundo a elegir entre carne o pescado y un postre. Todo ello acompañado de vino de la casa.

Entrantes. Sorprendentes.

Los aperitivos no aparecen en el menú y sorprenden al comensal por su originalidad. Croquetas variadas (de hongos, de chorizo y de cuatro quesos), antxoas marinadas, sopa de guisantes, mouse de queso con albahaca y pan tostado y aceitunas malagueñas. La sopa de guisantes exquisita.

Risoto con langostinos en salsa de cigalas.

Tomate de parra asado y relleno de txangurro sobre cremoso de patatas.

Como entrante pedimos ‘Tomate de parra asado y relleno de txangurro sobre cremoso de patatas’ y ‘Risoto con langostinos en salsa de cigalas’. El tomate estaba muy bien elaborado pero quizá pecaba de exceso de cremoso de patatas. El risoto resultó exquisito, con una salsa de cigalas muy lograda con un sabor muy intenso y potente.

Lomo de merluza de anzuelo asada sobre meloso de txipiron y salsa de su tinta.
Ciervo asado sobre jugo de carne.

De segundo decidimos probar la carne y el pescado, así que pedimos ‘Lomo de merluza de anzuelo asada sobre meloso de txipiron y salsa de su tinta’ y ‘Ciervo asado sobre jugo de carne’. Este último no venía en el menú y fue una recomendación de la camarera. No estuvo mal pero nada comparable a la merluza de anzuelo, una pasada, quizá la mejor merluza que haya probado. Sin exagerar. En su punto, jugosa, con un relleno de txangurro riquísimo…

Postres.

De postre elegimos ‘Mamia de leche de oveja con salsa de miel y galleta rota’ y ‘Mouse de café capuccino con helado de limón’. 

Dulce colofón.

Además, antes de traernos la cuenta nos obsequiaron con unas trufas de toffe deliciosas para acabar la comida con mejor sabor de boca, como si fuera posible.
En resumen, una agradabilísima sorpresa encontrar lugares como este en el que por 20 euros puedes disfrutar de un menú de alta cocina sin pagar precios elitistas solo al alcance de unos pocos pero con la seguridad de que vas a comer de maravilla tanto en cantidad como en calidad. 

P.d.: Gracias a Gloria por descubrirnos este lugar, seguimos abiertos a nuevas sugerencias.